28 julio 2005

Alonso, ¿ángel o demonio?

Aprovechando los muchos ratos libres de los que dispongo en Realmadrid.com he estado ojeando webs de críticas de videojuegos ya que voy a comprarme el F1 2005. Y de repente me encuentro con un foro que no hace sino asegurarme una de las ideas que me rondaban por la cabeza: Últimamente hay mucha gente que quiere ver "caer" a Fernando Alonso. (www.motorpasion.com)

Antes de comenzar a analizar el porqué de todo esto sólo quiero decir
una cosa, sin querer darme aires de grandeza (ni nada por el estilo): Llevo casi el mismo tiempo siguiendo la Fórmula 1 que el fútbol ya que mi padre ya era aficionado y ver juntos las carreras del "circo" ha sido una costumbre casi todos los domingos. En todo este tiempo, desde Ayrton Senna hasta apenas 4 años, a casi nadie en España le importaba este deporte. La muerte del brasileño - que por cierto aún recuerdo - o el dominio arrasador de Michael Schumacher eran las pocas cosas que cualquier persona ajena a la Fórmula 1 te podía decir. Personas que consideraban que es un deporte absurdo: "No hacen más que dar y dar vueltas todo el rato" solía ser su argumento más habitual.

Ahora esas personas se llenan , más o menos, cada dos domingos a soltar comentarios de expertos con las carreras. Ahora a todos les gusta la Fórmula 1. Ahora todos creen saber de la Fórmula 1.

Y todo gracias a un chaval de Asturias que con su duro trabajo ha llegado a donde está. Con su duro trabajo y un talento simplemente bestial unido a una capacidad de análisis en cada carrera que no se veía desde hace mucho tiempo. Ni siquiera el joven Michael Schumacher era así. Como dato habría que recordar los primeros pasos del alemán en búsqueda de su campeonato del mundo. Entonces creo recordar que el GP de Europa se disputaba en el Circuito de Jerez. A mediados de los años 90 - creo recordar que 92 y 97, no estoy seguro - Schumacher estaba en el grupo de los que se jugaban el título, junto con Damon Hill y Jacques Villeneuve. En ambas ocasiones hizo una jugada ciertamente sucia: Intentó sacar a su rival metiéndose por dentro cuando no tenía ganada la posición. Con Damon Hill lo consiguió, le sacó a pastar, ganó la carrear y poco después el campeonato del mundo. Con Villenueve, en la misma curva lo intentó otra vez, pero esta vez fue él el que se quedó fuera de la carrera... y creo que fue descalificado del mundial. Llegó a plantearse desde la "alta esfera" de la F1 que se retirara su superlicencia. No ocurrió y el germano recondujo - nunca mejor dicho - su carrera hasta situarse como el mejor del mundo.

Bien, todo este speech era para demostrar cómo si el mejor - por datos, por gustos ya es otra cosa - piloto de la F1 de la Historia era así de joven y es como es ahora, nuestro paisano no es, pese a la arrogancia que muchos le ponen, no es ni la décima parte de lo arrogante que era en su edad Schumacher. Las críticas que el Nano recibe es de ser prepotente por sus comentarios o por su
actitud. A VER: Un chaval que consigue llegar a la cima de su carrera con 24 años es posible que pueda cometer algún desliz en sus comentarios... pero es que es jóven y todos los jóvenes tendemos - casi por naturaleza - a no admitir siempre nuestros errores y a creer que podemos sacarlo todo nosotros solos.

Y a veces, más bien casi siempre, no será así. Para eso está la vida que tenemos por delante, para que nos enseñe y nos haga madurar. Querer minusvalorar el mayor prodigio que España a tenido en la F1, por lo que muchos hemos implorado durante años y años, por sus "comentarios" o por su "actitud" prepotente es propia de gente que en la mayoría de los casos no tiene ni puta idea y, hasta la llegada de Alonso, la Fórmula 1 ciertamente se la sudaba. A ver cuando no haya "alonsos" donde se meterán todos estos nuevos fans del gran circo. Entonces los de “siempre” seguiremos disfrutando tranquilos del gran circo.

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